Encuentro con mujeres activistas nicaragüenses

La semana pasada el equipo de Oxfam Intermón de Bilbao tuvimos la oportunidad de reunirnos con 5 mujeres nicaragüenses de diferentes movimientos que luchan en defensa de los derechos de las mujeres. María Teresa Blandón, directora de La Corriente Feminista y del Movimiento Feminista, Sandra Ramos, directora del Movimiento de Mujeres María Elena Cuadra, Juanita Jiménez, Coordinadora del Movimiento Autónomo de Mujeres, Ana Patricia Martínez, Directora de Fundación de Mujeres Blanca Arauz, y Damaris Ruiz, responsable del programa de derechos de las mujeres de Oxfam en Nicaragua.

Cada una de ellas desde un punto de vista diferente, pero ya sea defendiendo los derechos económicos de las mujeres trabajadoras de las maquilas, denunciando las violaciones de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres o intentando evitar que se siga retrocediendo en la penalización del derecho al aborto, todas ellas nos han transmitido la fuerza y la persistencia de sus diferentes organizaciones en pro de la defensa de los derechos de las mujeres en Nicaragua.

Siendo conscientes de que ésta no es una tarea fácil y de que los resultados no van a verse en un corto plazo de tiempo, nos demuestran un gran compromiso. Algunos de los movimientos son postrevolucionarios y han tenido que ir evolucionando con el tiempo, otros han nacido más recientemente, pero todas ellas coinciden en que es necesario generar una ciudadanía activa que sea capaz de transformar la realidad en la que vive.

Recientemente se han publicado informes que consideran que Nicaragua es uno de los 10 mejores países del mundo para que viva una mujer y los índices macroeconómicos establecen que Nicaragua ya no es un país que requiera apoyo por parte de la cooperación internacional. Pero la realidad es que los derechos de las mujeres se están reduciendo, existe una gran impunidad frente a la violencia de género que invisibiliza la violencia machista y actualmente sólo el 18% de las mujeres es propietaria de la tierra que cultiva. Su preocupación por la reducción de la cooperación internacional en Nicaragua es grande porque sigue siendo necesario permanecer en la lucha, y no es posible recibir apoyo económico del estado ya que éste no se da de una forma desinteresada y si algo tienen claro es que deben continuar siendo independientes.

Aunque en los orígenes todos estos movimientos trabajaban exclusivamente con mujeres, en la actualidad también están empezando a hacerlo con hombres jóvenes. El trabajo aún es largo y duro, pero ellos empiezan a ser conscientes de que es necesario tener unas relaciones diferentes entre mujeres y hombres, empiezan a sentir la necesidad de cambiar porque ven que están perdiendo al mantener una actitud machista.

María Teresa Blandón nos cuenta los cuatro retos que se plantean para los próximos tiempos. En primer lugar, en un país en el que la iglesia católica es muy influyente, consideran fundamental construir otra mirada de lo sagrado y que la iglesia no sea opresora para las mujeres. Por otra parte creen que hay que construir una sociedad no machista en la que exista otra forma de relacionarse entre hombres y mujeres y en la que los hombres sean conscientes de sus responsabilidades paternas. También quieren democratizar las instituciones públicas desde la sociedad civil ya que actualmente no existe una clase política con la que dialogar. Y por último ven fundamental reducir la brecha socio-económica que existe en el país. Pero ellas recalcan que estos no son únicamente retos de los movimientos sociales feministas, sino de todos los actores sociales con conceptos de justicia.

Aún les queda mucho trabajo y esfuerzo por delante, pero para nosotras han sido un ejemplo de ilusión, esperanza y fuerza. Nos hemos sentido muy reflejadas en muchos de los datos que nos contaban sobre el retroceso en los derechos de las mujeres e igual que ellas consideramos que es necesario construir ciudadanía crítica para poder seguir avanzando. Muchas gracias a todas por habernos dedicado este rato para contarnos vuestra lucha y ser un ejemplo para nosotras.